“Prefiero olvidarlas porque olvidar a la gente que sólo se conoció en palabras es extraño, mientras existieron fueron más intensas que lo real y ahora son más distantes que los desconocidos.”
Colección de once cuentos, “Las Cosas que Perdimos en el Fuego” (2016), es una novela escrita por Mariana Enriquez (1973). Relatos que narran la relación lúgubre que tenemos todos con el miedo y la violencia, tanto mental como física. Y las fuerzas motivantes de esta violencia emanan del entorno en el que se desarrollan los personajes, en una sociedad que acepta y digiere la violencia de manera natural.
Mariana Enriquez moldea estos relatos con una sutileza terrorífica, en este mundo obscuro, donde predomina el terror, el dolor, las llamas y las tinieblas de toda existencia. La violencia al ser una parte natural que todo ser humano lleva consigo, uno identifica y se siente familiarizado con este acto. Desde pequeños somos inculcados que la violencia es algo malo, por lo tanto la única manera, en la mayoría de las personas, de expresar este sentimiento o emoción que tenemos fisiológicamente es a través de la fantasía o ficción. En estos relatos somos testigos de casos relacionados con lo mencionado.
Cabe destacar que Mariana Enriquez presenta una constante en los once cuentos, cuerpos que desaparecen o reaparecen en el momento menos esperado. El terror se hace presente cuando logramos escarbar en las profundidades de los personajes, en lo más recóndito de su ser y empezamos a dudar del narrador. ¿Todo lo que está narrando sí es real, o todo estará en su cabeza y está jugando con nosotros? ¿Es todo parte de su trastorno mental y enloquecemos junto con él.